Por ello, un día soñamos que sería posible que el proyecto ANOCA visitara nuestros centros. Sabíamos de su propósito, de su intento de acercar la escuela y la vida de los centros penitenciarios a los centros de Secundaria para que todos creciéramos al compartir realidades. Nos pusimos en marcha para conseguirlo, conscientes de las dificultades, y por fin, llegó el momento.
Hoy he despedido a Miguel, Benito, Juan y Juan Luis en Novelda, después de su visita al IES Altaia y de su participación juntos a otros centros educativos en la Trobada Obrim una finestra al món, que se ha realizado esta mañana en Novelda. A ellos les quedan dos centros por visitar en Alacant y a mi, camino de casa, se me queda el corazón "tocado" en muchos sentidos. De emoción por compartir un gran abrazo grupal con mis alumn@s, que no querían que llegara el momento de la despedida. De agradecimiento a Juan y Miguel, por la generosidad que muestran al abrirnos su corazón, al pemitirnos entrar en su vida, conocer su recorrido, intentando siempre ayudar, movidos por el deseo de que otras personas puedan aprender de su dura experiencia y así evitarles el dolor de estar en un centro penitenciario. De admiración por su fuerza interior y su capacidad de superación en los momentos más adversos que podamos imaginar. De fuerza y torbellino vital, que en estos días nos ha envuelto de regalos y vivencias compartidas.
Solo puedo dar las gracias a tod@s los profesores y alumn@s que trabajan en el proyecto ANOCA y en el proyecto OBRIM UNA FINESTRA AL MÓN. A veces estamos cansad@s, tens@s, o parece que se nos cruzan los cables... y en otras ocasiones las cosas fluyen y el viento viene de cara, pero momentos como los vividos y compartidos estos días con ANOCA son los que nos llenan de energía y nos hacen seguir creyendo que nuestro trabajo vale la pena.
Gracias a todas las personas, "donyets i fades", que hacéis posible que la magia entre en nuestra realidad cada día.
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